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Este 1 de agosto se celebró el día mundial de la alegría, instaurado desde el año 2010 con el fin de tener presente la importancia de esta emoción en cada momento de la vida y su poder transformador.
Para cada persona la alegría puede ser detonada por circunstancias diferentes; sin embargo, esta tiene múltiples beneficios para nuestra salud, a nivel hormonal cuando nos sentimos alegres generamos un neurotransmisor llamado serotonina, que atenúa entre otras cosas nuestro estrés y nuestra ansiedad. Bajo estados emocionales alegres somos más creativos, más propensos a la interacción con los demás, más serviciales. Además, la alegría aumenta nuestras defensas.
Existen muchos estudios fascinantes sobre esta emoción y aquí te hacemos un resumen de ellos.
La felicidad activa todo el cuerpo: Investigadores finlandeses indujeron diferentes emociones en 701 participantes y luego los pusieron a colorear en un mapa del cuerpo donde sentían que aumentaba o disminuía la actividad. Es fascinante ver que la felicidad es la única emoción que llena todo el cuerpo con la actividad, incluyendo las piernas, tal vez lo que indica que las personas felices se sienten listas para entrar en acción.
Las personas son más felices cuando se ayudan: Quizás te has preguntado ¿Cómo ha hecho la gente para ser feliz frente a la pérdida de empleos, ganar menos dinero, el sentido de la desesperación y la falta de control sobre una pesadilla que parece no tener fin? Estudios revelan que las personas que se ayudan unos con otros con acciones pequeñas, son más felices. Por allí dicen: “La vida es mejor compartida”
La felicidad online es contagiosa: Uno de los más grandes estudios de Facebook examinó el contenido emocional de mil millones de mensajes durante dos años, a través de un software para analizar el contenido emocional. Resultó que las emociones positivas se propagan con más fuerza.
El envejecimiento cambia lo que te hace feliz: con la edad, las personas obtienen más placer de las experiencias cotidianas. Un estudio reciente preguntó a más de 200 personas entre las edades de 19 y 79 sobre las experiencias felices que habían tenido, tanto ordinarias como extraordinarias. En todos los grupos de edad en el estudio, la gente encontró placer en ambos tipos experiencias. Pero fue la gente de más edad, las que lograron extraer más placer de las experiencias relativamente comunes, como pasar tiempo con la familia, la mirada de un ser querido o un paseo por el parque. Las personas más jóvenes, por su parte, se definen más por experiencias extraordinarias.
Y como estos hay un sinfín de estudios que hablan sobre el poder que tiene la alegría en nuestro cuerpo y nuestra calidad de vida, no se trata de reír por todo, se trata de entender que no todo lo que nos pasa es negativo, que hay aprendizajes y procesos que nos hacen crecer y ser mejores personas.
La alegría es contagiosa y multiplicadora ¿te ha pasado que, si ves a alguien reír, al rato empiezas tu y no sabes por qué? Esto pasa porque se activan neuronas espejo en tu cerebro. Estas neuronas, que nos permiten experimentar las emociones que vemos en otros, desempeñan un papel determinante en la empatía y en la vida social. Además, se ha observado que el sonido de risas ajenas activa neuronas en nuestro córtex cerebral que preparan a los músculos del rostro para la risa.
Como comentario personal, siempre digo: “Nunca sabes cuando una sonrisa puede salvar una vida”